Es difícil expresar en pocas palabras lo que uno lleva en el corazón después de casi once años juntos.
Me cuesta dejar Santiponce, lo trabajado durante estos años y sobre todo me cuesta dejar a la gente. La gente que he podido llevarle el amor de Dios, que hemos vivido juntos alegrías y penas: funerales, bautizos, bodas, primeras comuniones, Corpus, procesiones, jóvenes, niños y adultos, aquellos que en nombre de Cristo y de su Iglesia escuché en el sacramento del perdón y les perdoné sus pecados.
A todos os llevaré siempre en el corazón y en la oración. Por eso me voy en paz, de saber que el trabajo ha sido realizado con cariño y dedicación.
Ayer tuve unos bautizos en la iglesia y mi amigo Manolo ,el fotógrafo ,me hizo esta foto, sentado en la sacristía. Es una foto con una sonrisa, sí, así quiero que me recordéis siempre. Como decía el apóstol Pablo: "estad siempre alegres en el Señor".
Estaré con vosotros hasta el último domingo de julio, en la Misa de las 10:30 de la mañana me despediré de la Parroquia de San Geroncio martir y de San Isidoro del Campo.
Mientras tanto, seguiré disfrutando de éste pueblo y de vosotros mis queridos amigos.
Los monaguillos han llorado en la Misa del domingo, y para consolarlos , les dije que no me voy muy lejos, en Sevilla en la Parroquia de San Pablo y en el Hospital de San Lázaro me seguiréis teniendo cercano.
Un abrazo a todos desde el corazón, que el Señor os bendiga mi querida Comunidad de Santiponce.
